Alejandro Magno
Hace poco pude ver por fin esta película que tanta repercusión mediática tuvo y, en líneas generales, me pareció bastante mediocre. Vamos, que la repercusión, como casi siempre en este tipo de películas, se debió más a que, supuestamente, le eliminaron a Farrell una escena de desnudo integral por el, supuestamente, enorme miembro que tiene (que desconcertó al público que vio el preestreno) y a que, supuestamente, la Jolie y Farrell se enrollaron. Pues qué bien. Carne de prensa amarilla.
La película no empieza mal. Tono épico, buenas interpretaciones, historia interesante... pero acaba convertida en algo muy descafeinado, sin ritmo y que acaba aburriendo. Vamos, que le sobran varios -bastantes- minutos. Y esto es algo muy grave cuando se trata de reflejar la biografía de un personaje tan interesante como Alejandro Magno. Es decir, reconozco que no estoy excesivamente familiarizado con la historia del personaje, pero sí que considero que se dejan demasiados elementos sin tratar, que se pasa por encima por algunos, como la sexualidad del personaje, que, por una parte, se refleja de una forma bastante tierna, pero, por otra, resulta poco natural, ya que nos meten una escena de cama de casi cinco minutos con su mujer, pero a su amante masculino lo más que le da es un abrazo... supongo que es cuestión de la mentalidad americana, como en Troya y la relación de "Pitt" y su "primo"... También la importancia de la educación del personaje aparece sólo meramente apuntada, cuando es el fundamento de su idea de un imperio universal, pero, claro, el protagonista de la película es Farrell y no el niño que hace del joven Alejandro.
Lo mejor de la película está, creo, hacia la mitad de la película. Cuando Alejandro y su ejército han conquistado Babilonia y comienzan a cruzar el continente. Las disputas internas, la batallas, las consecuencias de las mismas (me pareció muy logrado que pusieran cicatrices, enfermedades y demás de forma visible, porque últimamente no era lo que yo me encontraba en otras películas, en las que los protagonistas parecían salir indemnes de todas sus luchas). La idea de Alejandro de formar un imperio universal creo que sí que se recoge en esta parte. Le vemos seguir caminando hacia lo desconocido y obligando a sus cada vez más numerosos ejércitos y seguidores a ir con él hacia un destino incierto, pero que, sin que lo sepan, será grandioso. Es en esta parte donde disfrutamos del paisaje, de la caracterización y de la puesta en escena, que resulta impresionante. Y es lo que sube mucho la marca de la película, pese a que es también, paradójicamente, lo que considero que hace se alargue demasiado...
La llegada a la India significa el fin de la película. A partir de aquí, todo es muy caótico. No sólo porque la derrota en la batalla así lo exija (por cierto, buena batalla, pero no me convenció... y no sé por qué), sino porque acaba por resultar aburrida porque la película, quizás, ya se ha pasado de tiempo. La duración de la película es, por tanto, el mayor problema. Si querían contar la vida de Alejandro Magno sólo se me ocurren dos opciones: o hacer dos películas o resumir aún más la actual y quitar escenas insustanciales o reducirlas un poco, porque la última media hora se hace inaguantable. Lo mismo que Troya...
Nota: 5/10